Como muchas otras grandes empresas, esta inició desde abajo. En los años 70, Jim Jannard, un diseñador del Estado Washington (EE.UU.), tuvo la idea de romper con los paradigmas del diseño de implementos deportivos y fundó, en un garaje y con un capital de 300 dólares, la marca Oakley. Su primer producto fue una empuñadura para motocicleta que, a diferencia de las demás, fue hecha con un material patentado como Unobtainium, que por sus cualidades era antiderrapante y aumentaba el agarre. Posteriormente se diseñaron relojes, bolsos, zapatos y la especialidad de la marca, las gafas deportivas.
Ser una empresa que permanece a la vanguardia en el sector del equipamiento deportivo ha hecho que, actualmente, la marca cuenta con más de 600 patentes de productos. Con respecto al desarrollo de gafas deportivas, Oakley ha logrado enormes avances para deportes como el ciclismo, el ciclismo de montaña, el motociclismo, el BMX, el esquí, el snowboarding, entre otros.