X-SOCKS comienza su andadura en el año 2000, en la población italiana de Asola, cuando crean unos calcetines específicos para deportistas. Los diseños creados son capaces de añadir más comodidad y ayudar a que los atletas puedan practicar deporte de forma más eficiente. Para ello, X-SOCKS no dudó en utilizar recursos tecnológicos como membranas, materiales especiales y diseños ergonómicos que hacen de estos productos unos artículos más cercanos a la aeronáutica que al deporte y donde el sudor se utiliza como fuente de energía.
Para lograr dotar de ciencia y tecnología a sus productos, X-SOCKS estableció una alianza con X-BIONICS, una empresa de ingeniería centrada en la aplicación de las últimas tecnologías al diseño de ropa. Todo este trabajo ha permitido a la marca X-SOCKS recibir algunos premios y reconocimientos como Reddot Award 2018 Winner en varias ocasiones y otros premios importantes desde el año 2005.
Además de calcetines funcionales, X-SOCKS ha desarrollado más productos a lo largo de estos años para la práctica del ciclismo como mallas, monos completos o ropa interior.